La
Soja
La soja. ¿Una moda realmente? ¿Nos atrevemos con
el fundamento y razonamiento científico de que disponemos en la actualidad, a
llamar moda a un alimento que ha demostrado a través de los siglos su enorme
complejidad alimenticia, y sus altas propiedades?
La palabra moda indica en su mismo espíritu que es algo
con duración limitada. Que por sus características estéticas y visuales llegará
a cansar su continua observación en el caso del arte, del cune, de la
literatura ligera, de la ropa y componentes que dejan de tener vigencia de un
año para otro.
Pero la soja, no debemos considerarla como una
moda pasajera, con fecha de caducidad y olvido.
La soja se consume por más de 2000.000.000 de
personas por todo el mundo, y su cultivo y distribución va en considerable
aumento.
De hecho, una de las formas de consumir la soja
más beneficiosa en cuando germina, por la alta concentración de propiedades
activas que posee en ese momento. Aunque no hay un estudio definitivo, se
calcula en más de 20, los millones de germinadores de cerámica fabricados para
consumo casero.
Su uso es muy sencillo, pues consta de de varios
recipientes en cascada con la base con pequeños agujeros para que el agua
discurra lentamente del recipiente superior donde se almacena, a los
recipientes inferiores donde están depositadas las semillas de soja, y
esa humedad continua las va haciendo crecer y convertirse en pequeños plantones
que se consumen cuando alcanzan unos 5 ó 6 centímetros.
La soja es una realidad que no pasará de moda.
Las propiedades nutritivas de la soja
Mucha gente consume soja por impulso de la
publicidad, sin estar plenamente convencido de las ventajas que posee la soja
.
Lo primero de todo es que la soja es rica en
proteínas, lípidos, glúcidos y minerales. Lo más conocido de todo es que tiene
isoflavonas, en concreto genisteína, daidceína y gliceteína. ¿Pero que son las
isoflavonas? Según una enciclopedia son “un conjunto poco específico de
compuestos naturales que están presentes en diversos vegetales” y que tienen
acciones muy similares a las que realizan algunas hormonas en el organismo.
Además de esto, la soja también tiene fitoestrógenos, sustancias
químicas importantes para nuestro cuerpo.
Por si lo de antes fuera poco, el grano de soja tiene un
gran número de minerales, tales como el calcio, el zinc y el hierro. Y la
soja es fuente de fibra soluble e insoluble, cuyos beneficios para el
organismo son indiscutibles.
Todo eso está muy bien, pero ¿cuál es su valor
nutricional? La soja tiene una gran concentración de proteínas de fácil
absorción por el organismo y sin los riesgos que en ocasiones supone, el
consumo de proteínas de carácter animal. La soja tiene todos los
aminoácidos esenciales necesarios para cubrir las necesidades del ser humano en
todas las fases de su vida, desde la infancia hasta la vejez. Por eso, una
dieta rica en soja es sinónimo de equilibrio corporal y de buena salud cuando
se acompaña de otros estilos de vida sanos.
Cinco beneficios insólitos de la soja
Que la soja está de moda es un hecho innegable.
Desde aquí te recomiendo a ser una/o ferviente consumidora/o de soja. Pero no
por seguir los parámetros que nos mandan los especialistas de marketing, sino
porque estés plenamente convencida/o. Te doy cinco razones de peso para pasarte
a la soja. Toma nota.
PRIMERA. Consumir soja frecuentemente reduce
el riesgo de enfermedades cardíacas. Las proteínas que contiene reducen el colesterol perjudicial y disminuyen la coagulación sanguínea, por
lo que evitamos ataques al corazón y apoplejía.
SEGUNDA. La soja te protege contra el cáncer.
Las fibras solubles de la soja forman una capa protectora en el aparato
digestivo, colon y recto, minimizando los riesgos de contraer estos tipos de
cáncer. Estudios científicos también significan la disminución del cáncer de
mama, próstata y una larga lista.
TERCERA. La soja aumenta la capacidad del organismo
para retener y absorber el calcio en los huesos, por lo
que protege contra la osteoporosis. Las isoflavonas
de la soja también ayudan a la formación
de huesos nuevos, por lo que es un alimento muy recomendable desde la infancia.
CUARTA. Otro de los beneficios de la soja
es que ayuda a controlar la diabetes y las enfermedades del riñón. Esto se debe
a que su fibra regula los niveles de glucosa y las filtraciones renales.
QUINTA. La soja es un tratamiento excelente
para la piel y es utilizada por ello en numerosas cremas
anti-edad y antiarrugas. ¿Por qué? Porque retiene la hidratación de la piel, actúa
como antioxidante y estimula la creación del colágeno de la piel.
¿Necesitas más razones para pasarte a la soja?
Grandes propiedades de la soja
Mucho se ha divulgado sobre los beneficios y altas
propiedades de la graminea llamada soja. También mucho se ha investigado y
demostrado sobre un continuo y dosificado consumo de la soja. Voy a continuación
a hacer un breve resumen de sus principales propiedades.
- Su contenido en Isoflavonas productoras de estrógenos.
- Sus propiedades antioxidantes.
- Su alto aporte calórico, pero sin grasas, que previene problemas cardiovasculares y de circulación.
- Actúan sobre el equilibrio hormonal, y previenen la osteoporosis, enfermedad de graves consecuencias cuando la edad avanza.
- Reduce el colesterol malo, y disminuye la coagulación sanguínea, bajando los riesgos de la apoplegía.
- Protege el cuerpo contra muchos tipos de cancer digestivo, de colón, gracias a sus fibras solubles.
- Previene problemas de próstata, al prevenir y reducir el ritmo de ensanchamiento de la glándula prostática, propio déla edad, y que causa a veces determinados problemas urinarios bastante incómodos.
- Protege contra la descalcificación y la osteoporosis, aumentando la capacidad regenerativa de tendones y huesos, y aliviando suavemente los dolores producidos comúnmente cuando la enfermedad se haya en un estado avanzado.
- Sus Isoflavonas reparan y ayudan a prevenir en porcentajes considerables, los daños celulares causados por la oxidación, la altísima contaminación que soportamos diariamente, y un peligroso enemigo, la luz solar en exceso.
Sin duda la soja, nos protege de muchas irregularidades
conocidas de nuestro organismo, pero ¿de cuantas más que aún se encuentran en
periodo de investigación, estará protegiéndonos ahora, gracias a su consumo
regulado por nuestro dietista,o medico de familia? La soja es sin duda, una
protección real, para nuestra presente sociedad.
Historia y propiedades de la soja
La historia de la soja, como tantas otras
historias que son más, leyendas o tradiciones verbales o escritas que fueron
transmitidas a través de los años y siglos formando a veces cuentos apasionantes
llenos de color ultramarino. Cada individuo la va transmitiendo con sus propias
palabras e inventiva, y la forma de narrar cambia con los siglos variando
substancialmente respecto de la auténtica.
Y cuenta la actual tradición que la soja data su
descubrimiento hace más de 3400 años, aproximadamente. Sheng-Nung, apasionado
naturalista, y emperador chino, tenía en propiedad grandes extensiones de
terrenos baldíos e improductivos, donde daba trabajo, más bien explotaba a una
parte de su pueblo.
Un día el azar hizo que en un especialmente árido rincón
de sus propiedades, él mismo descubriera la soja, una planta
leguminosa en estado silvestre y que se extendía sin cuidado alguno por al
menos unos 200
metros cuadrados. Detuvo su expedición y recogió personalmente
y con sumo cuidado una cantidad grande de la leguminosa, y otra cantidad más
pequeña para transplantarla en palacio.
Personalmente también la probó y empezó un estudio
riguroso de las propiedades de la soja , anotándolas en papel, y avanzando
en las investigaciones, dedicó más de 18 años a descubrir sus efectos
preventivos y curativos. Reseñó también en abundante documentación, las
propiedades alimenticias que iba descubriendo. Finalmente, decidió plasmarlo en
un libro que tituló, MATERIA MÉDICA, y que hoy casi ningún canon científico
duda de su autoría.
El transmitió, que la soja era una de las 5
semillas sagradas del este, y las otras 4, eran la cebada, el trigo, por
supuesto el arroz y el mijo.
Y hasta nuestros días prevalece esta singular historia de la soja. Y no
nos ha decepcionado.
Derivados de la soja.
Harina. Muy rica en
proteínas. Se emplea en pastelería y panadería.
Aceite de soja. Buena fuente de grasas poliinsaturadas, en especial de ácido linolénico.
Lecitina. Interviene en el
control del colesterol en sangre y en el metabolismo de las grasas. Se emplea
como complemento dietético en situaciones de hipercolesterolemia.
Bebida de soja. En comparación con la leche de vaca, esta bebida no contiene lactosa
(azúcar de la leche), caseínas (proteínas lácteas), vitamina B12, grasas
saturadas, colesterol y aporta menor cantidad de sodio y calorías. La bebida
comercial puede estar enriquecida en calcio, vitamina B12 y vitaminas A y D e
incluir aromas (vainilla, almendra, etc.) y zumo. Por su buen aporte de calcio
asimilable se emplea como sustituto de la leche de vaca en caso de alergia a la
proteína de la leche de vaca, intolerancia a la lactosa, así como cuando existe
asma crónica u otras afecciones respiratorias, ya que en dichas personas los
lácteos aumentan y espesan las mucosidades, empeorando su bienestar.
Tofu o cuajado de soja. Su aspecto es similar al del queso. Es rico en proteínas, pobre en grasas
y de fácil digestión. Contiene vitaminas del grupo B, vitamina E y minerales
(calcio, fósforo, hierro, potasio). No tiene sabor propio, por lo que se emplea
en platos muy diversos. Se puede utilizar troceado o batido para obtener patés
y salsas.
Tamari. Salsa que se
elabora a partir de soja, trigo y sal. Realza el sabor de la carne, el pescado
y los vegetales. La hay de diferentes tipos, si bien todas son ricas en sodio y
contienen gran cantidad de ácido glutámico (aminoácido no esencial que le
confiere un gusto que recuerda al de la carne).
Tempeh. Es un derivado
fermentado, de aspecto compacto, rico en proteínas, grasas insaturadas,
vitaminas del grupo B (B1, B2 y B12) y minerales (calcio, fósforo, hierro). Se
puede cocinar del mismo modo que las carnes.
Brotes de soja. Son tiernos y sabrosos. Se emplean en ensaladas, triturados, etc.
Son ricos en vitamina C y en enzimas; sustancias que facilitan la digestión.
Bueno espero que os gustara el
tema de hoy,y os animéis a probar todos los derivados de la soja, a mi
personalmente me encanta!!!; Mañana os hablare sobre otro
nutriente y sobre mas alimentos, y promete subir algún look!!!
AHHH!!! Y no dudéis en preguntar
lo que queráis aquí tenéis a vuestra dietista personal para lo que necesitéis
saber.
Un saludo de Piña y Alcachofa
:)
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